Si soy yo el héroe de mi propia vida o si otro cualquiera me reemplazará, lo dirán estas páginas.
Para empezar mi historia desde el principio, diré que nací (según me han dicho y yo lo creo) un viernes a las doce en punto de la noche. Y, cosa curiosa, el reloj empezó a sonar y yo a gritar simultáneamente.
Desde aquello 18 años y algun dia ha pasado, pero mi memoria es un cumulo de inconcluencias que no quiero rememorar.